miércoles, 27 de julio de 2016

República Dominicana y el rechazo a la identidad



Lo que me inspiró a escribir sobre este tema es este artículo: https://remolacha.net/cheddy-le-dice-unas-cuantas-cosas-a-la-ministra-de-educacion/  apoyo lo natural y el racismo y los acosos a los que te enfrentas al mostrarte como eres no son juego en República Dominicana, un país donde la mayoría son mulatos y no aceptan los rasgos o características propias de esta variante étnica. No está mal lucir un pelo lacio, pero que te prohíban prácticamente mostrarte como eres no puede ser correcto. He experimentado éste tipo de críticas y esto es lo que opino sobre el tema:

Lo hermoso no es ocultarse

Esto es tan cierto, de hecho son tan pocas las personas que te aceptan naturalmente, tú decides lo que haces con tu físico, pero es simplemente increíble que exista gente que a estas alturas siga considerando como lo correcto el ocultar lo que eres. Tener tu pelo natural es andar desarreglado. Si tener el pelo crespo o rizo se volviera tendencia entre los países del primer mundo, veríamos a los salones del país quebrar, puesto que también se toma muy en cuenta las opiniones de las grandes naciones.
La razón por la que otras culturas nos parecen atractivas nunca será porque se avergüencen de ser lo que son, ni el que muestren una imagen difusa de su realidad, sino todo lo contrario. Los chinos son hermosos con sus ojos rasgados y su pelo negro y lacio; los escoceses con sus pecas y el pelo rojo alborotado; los indígenas con sus pómulos sobresalientes y sus cuerpos robustos; los italianos con su pelo suave y sus ojos claros…y nosotros, nosotros somos un país en donde puedes encontrar una exageradamente amplia variedad de razas; incluso en una misma familia puedes encontrar muy negros, muy blancos, mestizos… No se empeñen en perder su identidad,  belleza no es moda,  belleza no es maquillaje, no es ocultarse. Es  hacer uso de lo que tenemos, es  ser lo que somos y estar feliz de ello…belleza es salud y lo artificial nunca será más hermoso ni más saludable que la autenticidad.
¿Quieren hacer la diferencia? Sean auténticos en un tiempo en el que casi todo es sintético.

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